jueves, 25 de agosto de 2011

SABER ESCUCHAR

El arte de saber escuchar se ha transformado en una destreza que se puede entrenar.

La comunicación  hizo de la indefensa criatura humana el dominador de la naturaleza.

Sin embargo, se puede hablar sin saber decir y oír sin saber escuchar.
Quizás, el hombre fue dotado con tres orejas  - dos oídos y un corazón - para saber escuchar en lugar de atender sólo lo necesario para retrucar, ignorar o fingir que se está prestando atención. El que sabe escuchar  mejora la calidad de la conversación. Hasta la naturaleza parece habernos dotado de dos orejas y de una sola lengua, para escuchar el doble de lo que hablamos.

  Sólo el 7 % de la comunicación es verbal, porque las emociones se expresan en formas, tonos de voz, expresiones y ademanes que hay que saber escuchar. Por eso hay que observar más  lo que se hace que lo que se dice.

No basta con simpatizar con el interlocutor que es estar de acuerdo. En la empatía existe un valor agregado: sentir lo que el otro siente, saber lo que le pasa, detectar la congruencia entre lo que se dice, se piensa y se corporiza. La empatía mutua provoca sintonía y llega al altruismo, a la destreza social y al liderazgo.


¡Qué placer es estar con alguien así!. Los hombres son actores que expresan el libreto que la cultura les permite. Pueden minimizar, exagerar o disfrazar emociones para no herir. Esa capacidad produce un impacto, las emociones contagian y se transfieren como un virus.Quien sabe escuchar estas señales, incrementa  su poder de persuasión que se mide por el grado de influencia. Los que se "meten en el bolsillo a la gente" arman agendas, median en conflictos,  porque saben conectarse. La clave es aprender a realizar un identikit auditivo.


Una ética para la disputa. Hay diálogos entre sordos o por intereses que generan un doble discurso entre lo que se piensa y lo que se dice, produciendo así modelos defensivos. Tomar conciencia facilita el diálogo constructivo, coherente y verificable. En los asuntos humanos no se trata sólo de hallar la verdad sino de alcanzar metas personales como  autoestima, confianza y competencia.Saber escuchar la voz de la gente. Muchas empresas y gobiernos no escuchan la demanda de desarrollo personal, social y económico, no buscan disminuir la brecha digital, no usan sus portales para que la gente acceda a sus necesidades con capacitación digital. Entonces la gente no incorpora el enorme diferencial simbólico de la apropiación tecnológica. La crisis suele ser la excusa para la falta de políticas.Conócete a ti mismo. Saber escuchar la voz interior es la destreza máxima, ya que quien no sabe lo que quiere hace indiferente al camino que elija. El peligro es tratar de gustar perdiendo fidelidad con uno mismo. También hay que saber escuchar al otro, compartir y contagiarse con sus alegrías y  procesar o contener sus angustias. Quien no escucha vende productos, quien sabe escuchar vende soluciones. Las mejores empresas son las que escuchan al cliente porque la información es el poder que permite transmitir el mensaje apropiado cuando nos llegue el turno de hacer  uso de la palabra.El aprendizaje de la escucha es progresivo: reproducir el contenido, poder repetirlo con otras palabras, descifrar las emociones, reunir todos los factores. El sonido más melodioso para el oído humano es el nombre propio. Hay que demostrar ese interés por el interlocutor a través del feedback, repreguntando, mirando a la cara, tomando notas. La clave es evitar el diálogo interno mientras el otro habla. Saber escuchar es el primer paso hacia la sabiduría que consiste en  construir redes que estén disponibles antes de usarlas:

  redes de comunicación, redes de expertos y  redes de confianza.

Poner la oreja.  La sensibilidad se acrecienta en estado de calma. La credibilidad crece al entregarse al otro  para poder influir después, en lugar de dar consejos fuera de contexto. Saber escuchar exige dejar de juzgar, crear un espacio de silencio que conecte con el potencial  para poder responder  con  responsabilidad  sabiendo manejar las propias emociones . Se recuerda el 5% de lo que se escucha, el 25% de lo que se ve y el 90 % de lo que se hace. Por lo tanto, hay que escuchar activamente, con entusiasmo, haciendo de la escucha una  un acto. El gran maestro de la escucha  fue Sócrates quien escuchando lograba un milagro: hacía  parir ideas. Saber escuchar es conocer tanto al interlocutor como para decirle: "Lo que tú eres resuena tan fuerte en mis oídos que no puedo escuchar lo que me dices".

Fuente de San Miguel Zócalo Puebla

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martes, 23 de agosto de 2011

Cúpula

Bella toma de nuestra Catedral .
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Cerca de el Parian

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TECALI DE HERRERA

Fotos de las Ruinas del ex convento franciscano de Tecali de Herrera, construido durante el siglo XVI   Guillermo Reynoso

Tecali de Herrera es uno de los 217 MUNICIPIOS de Puebla.
Se localiza en el centro del estado y forma parte de la Zona Metropilitana de Puebla.
Originalmente fue una población fundada por grupos de indígenas Totimehuaques y Cuautinchán Tlacas, aproximadamente en el siglo XII de nuestra era; se trata de una pequeña parcialidad del centro religioso y político de Cuautinchán. Con la conquista de México, Tecali rinde tributo a Tepeyacac con piedra de Tecali. Apareciendo en la matrícula de tributos a Moctezuma con el nombre de Tecalco que quiere decir "la casa de piedra". En 1520 Francisco de Montaño se instala como el primer comendador de este lugar. En 1696 Tecali fue privado de la encomienda y parte de los tributos fueron privados de la colecta de 1603. En el año de 1643 fue suprimida la Alcaldía Mayor de Tepeaca y aparece Santiago Tecali, considerado como un centro. Desde 1787 el Magistrado fue un subdelegado inferior de la Intendencia de Puebla. En 1861 el Gobernador Interino de Puebla, Francisco Ibarra, decreta villa a Tecali y cabecera de municipio, y es nombrado oficialmente Tecali de Herrera en honor del coronel Ambrosio Herrera.

AFLICCION

UNAS DE LAS MAYORES CAUSAS DE AFLICCIÓN DE LAS PERSONAS ES EL SENTIMIENTO DE DESCONTENTO, FRENTE A LO QUE RECIBEN DE LA VIDA YA SEA EN EL ÁMBITO PROFESIONAL O PERSONAL, Y A MEDIDA QUE LOS AÑOS PASAN Y SE AVANZA A LA HACIA LA EDAD DE LA JUBILACIÓN, SE PONEN A DUDAR DE SU VALOR Y EL DE SUS REALIZACIONES. LA CONVICCIÓN DE QUE HABRÍAN PODIDO HACER MUCHO MÁS Y SER FELICES, ES PARA ELLOS UNA FUENTE DE FRUSTRACIONES.

MUCHAS VECES ESTAS PERSONAS SE PASAN LA VIDA EN BUSCA DE CULPABLES.

SIN DARSE CUENTA, NI LA OPORTUNIDAD DE VER QUE SON ELLOS, ELLOS MISMOS QUIENES SE HAN HECHO ESA POBRE OPINION.

RECOMIENDO CREAR EL HABITO DE PENSARSE DE SI MISMO COMO UN SER POSITIVO CON LOGROS, NO IMPORTA EL TAMAÑO DE LOS LOGROS, SINO EL REALIZAR MUCHOS A LO LARGO DE SU VIDA, Y UNO TRAS OTRO.

DE NINGUNA MANERA PERMITIR ESTANCAR SU VALOR MIDIENDOLO POR LAS APARIENCIAS.

EL VERDADERO VALOR LO LLEVAMOS DENTRO Y ES ASÍ COMO PODREMOS VER Y CONOCER NUESTRO VERDADERO POTENCIAL.

NO CREO NECESARIO GRITARLO A LOS CUATRO VIENTOS PARA RECIBIR EL APLAUSO DE LA GENTE, ES MAS IMPORTANTE EL PROPIO.

SALUDOS